Florencia Nieto, con la franja que la acredita como Miss Chubut
“Miss Argentina es el certamen de mayor
antigüedad, el más conocido, el de mayor prestigio y trayectoria; el que está
impuesto en la memoria colectiva de varias generaciones de argentinas, incluida
la de nuestras abuelas que aún recuerdan a la primera Miss Argentina, la
hermosa cordobesa Tulia Ciámpoli, elegida en 1928”.
Eso dice el certamen en su página oficial. Miss Argentina se realizó por
primera vez por medio de la revista El
Hogar, de la editorial Haynes. Luego fue propiedad del modisto Jean Cartier
y en los ‘90, se registró a nombre de la familia Branchetti. Entre las misses
argentinas famosas se encuentran Isabel “La Coca” Sarli, coronada en 1955; la
Miss Universo 1962 Norma Nolan; la Miss Belleza Internacional 1968, Mirta Massa;
la actriz Adriana Salgueiro; la Miss Mundo 1978 Silvana Suárez y Carolina
Branchetti, Miss Argentina 1987 y actual coordinadora del certamen.
***
–¿Cómo fue tu experiencia en el circuito de la belleza?
–Mi primera experiencia fue en la Elección de
la Reina del Petróleo en 2007 y me anoté porque quería comprarme el
amplificador para el bajo (risas). En ese momento tenía 17 años y no podía
trabajar de nada, así que pensé que si ganaba - algo bastante ingenuo porque la
primera vez que te presentás no vas a ganar- lo iba a poder conseguir. Después
hice promociones y me di cuenta que era redituable, así que seguí con eso.
Aparte, así no tenía que depender tanto de mis papás para comprarme mis cosas.
(En revista Noche Polar, mayo 2010)
***
La Elección de Miss Chubut para Miss
Argentina se realizó en un boliche de Comodoro Rivadavia. Con la excepción de
una candidata trelewense, todas las postulantes eran comodorenses. El desfile
se anunciaba como el atractivo de la noche. Chicas caminando por la pasarela en
vestido corto. Chicas caminando por la pasarela en bikini. Chicas caminando por
la pasarela en vestidos de gala. Chicas caminando mientras un jurado traducía
en números su manera de desfilar, su sonrisa, su rostro, su elegancia. Luis
Ventura leía los nombres de las candidatas y los datos que interesan en los
certámenes de belleza.
–Ella
es Florencia Nieto Zuljevic Karaman. Tiene 19 años. Mide 1,78. Sus medidas son
90-71-97. Su hobby es tocar el bajo y estudia Comunicación Social.
Aunque
había accedido a participar de relleno y con la condición de que se me pagara
como un desfile más, me temblaban las piernas. No había premio, algo de ropa,
un voucher para una limpieza de cutis en el spa local, flores, una corona, una
capa y una banda bordada a mano que decía Miss Chubut. Bueno, y participar en
Miss Argentina para Miss Atlántico Internacional.
Tenía
una argolla en la nariz y un flequillo extraño que amenazaba escaparse por los
costados. La semana anterior me había cortado el pelo sola inspirada por un
tema de Foo Fighters que escuché en el colectivo volviendo a casa de la
universidad. Si me lo peinaba no quedaba tan mal, pero tampoco bien. Tomé una
copa de champagne antes de la primera pasada, antes de la segunda pasada, antes
de la tercera pasada y me fumé un pucho antes de la coronación.
-Me
van a pagar igual ¿No? porque acá no gano ni a palos.
-Sí,
Flor, te pagamos como un desfile más
***
El viernes 30 se realizó en la
Ciudad de Comodoro Rivadavia, en la disco Punto Com, la elección de Miss Chubut
2009, donde Florencia Nieto Zuljevic Karaman de 19 años, de 1,78 m., fue
elegida como representante de la provincia. El evento fue organizado por Models
Agency, delegados de Santa Cruz y Chubut, y conducido por el señor Luis Ventura
y Anabella Teppa. La presencia de Miss Santa Cruz 2009 para Miss Argentina,
Daniela Álvarez, de la localidad de Cte. Luis Piedrabuena fue notoria en todo
el evento.
(aquishow.com.ar, noviembre 2009)
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¿Cómo
es la cuestión tras bastidores en los concursos? ¿Cómo te preparás para un
evento así?
En
realidad yo dije “Es Miss Argentina, bueno, tengo que empezar el gimnasio”,
pero entre la falta de tiempo por el estudio y que en la uni no podés no comer
alfajores y papas fritas (risas), casi no tuve preparación, sólo practiqué mi
caminata. Lo que sí hice fue estudiar acerca de la provincia.
(En revista Noche Polar, mayo 2010)
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El
día antes de viajar preparé mi música. Nirvana, Foo Fighters, The Strokes, Muse, Rage Against
The Machine, Amy Winehouse, los Ramones, Blur y algo de Gorillaz. Además, un par de vestidos, zapatos de taco,
ballerinas, un short negro, mi remera de los Sex Pistols que decía God Save The
Queen. Lo que ocupaba más lugar en el bolso era el vestido de la tercera
pasada, un traje típico a telar mapuche que me habían prestado las tejedoras de
Colección Chubut. Era celeste y verde agua como el mar. Se decía que una Miss
Chubut anterior le había pedido al gobernador ropa para competir y que él le había
comprado vestidos de Las Oreiro y zapatos de Ricky Sarkany. No sé, yo no lo
intenté, me parecía que la provincia tenía mejores cosas en las que invertir su
presupuesto.
Llegué
a la Terminal de Retiro el 29 de noviembre a la mañana y esperé a Marcelo Aguilera,
mi delegado. Él había organizado la elección de Miss Chubut y, además, hecho
las gestiones correspondientes para mi llegada al certamen nacional. Cada Miss
tenía su delegado y debía presentarse con él. Mientras tanto, compré unos
lentes wayfarer de marco rosa –en Comodoro no había de esos–, un muñequito de Sabato
y regalos para mi familia. Deambulé una hora hasta que Marcelo me envió un
mensaje de texto diciendo que estaba en la entrada. De ahí tomamos un taxi
hasta el hotel en donde estaba Miss Santa Cruz. No la había visto bien en la
elección, el lugar estaba oscuro y yo muy nerviosa. La miré de verdad, parecía
salida de un cuadro de Boticelli. Me contaba cuántos kilos había bajado para el
certamen y de sus inconvenientes con el
vestuario.
–Tuve
problemas con mi vestido de gala, la modista lo tuvo que alargar.
–¿Para
qué vestido de gala?
–Para
la pasada de gala
–¿Hay
pasada de gala? Yo pensé que era de traje típico.
–No,
no te coronan en traje típico, es de gala.
–¿En
serio?
–Sí
¿Qué vas a hacer?
–No
sé ¿Pasar con el traje típico?
–No,
no podés pasar con el traje típico.
Si
la distribución de las candidatas en las habitaciones se regía por la ubicación
geográfica de las provincias, nos tocaría compartir. Cosa que a Miss Santa Cruz
le tranquilizaba. Me decía que tenía que tener cuidado, que esto era una
competencia. En cuanto llegamos a la recepción, me informaron el número de
habitación y que mis compañeras serían Miss Jujuy y Miss Entre Ríos. Santa Cruz
y yo fuimos a mi habitación. Comimos en silencio los sandwiches de jamón y queso que nos había comprado Marcelo.
***
¿Hay un clima de competición fuerte?
¿Cómo son las otras concursantes?
Por
mi parte no había competencia, yo sabía que ellas se habían preparado mucho
para eso y yo no tanto. Pero el primer día estaba hablando con una de las
chicas y me dijo que tenga cuidado, que si las demás me veían haciendo algo
raro me iban a hacer descalificar, que guardara bien mis cosas para que no me
las revisen, etc. Tenía muchísimo miedo. Al final me tocó compartir la
habitación con otras dos concursantes que eran muy piolas, no teníamos muchas
cosas en común pero se armó cierta complicidad entre nosotras, eso fue genial.
Vas conociendo gente distinta y mantenés una buena relación porque son buenas
personas.
(En
Noche Polar,
mayo 2010)
***
Nos
hospedábamos en un hotel cuatro estrellas ubicado en Avenida Independencia. Las
habitaciones eran cómodas y ofrecían un buen desayuno buffet. Miss Capital
Federal llegó un día después: era una chica flaquísima con piernas flaquísimas
que sería bailarina de Tinelli para después modelar en Italia y luego ponerse
de novia con uno de los convocados por Sabella para el Mundial de Brasil. Las
demás Misses decían que ella iba a ganar, que Miss Capital siempre ganaba. Yo
estaba segura de que ganaba Miss Salta, era la chica más hermosa, campechana y
simpática que había visto en la vida, pero yo qué sabía. Miss Chaco también
podía ser. Una morocha preciosa de ojos claros que me mostraba un celular
plagado de auto fotos con su mamá, otra morocha preciosa de ojos claros. Luego,
sería modelo de alta costura de Royal Model Management en Nueva Delhi. Miss
Córdoba era una chica esquelética de nariz respingada que no hablaba mucho.
Miss Mendoza a menudo se quejaba con una voz nasal y se miraba en cada espejo
por el que pasara. Miss San Juan ya había sido Miss Argentina, había concursado
por Miss Universo en Vietnam y ahí había conocido a Lady Gaga. Miss Tierra Del
Fuego tenía un aire a Paris Hilton. Miss Entre Ríos tenía el pelo negro,
enrulado, larguísimo y nos la pasábamos repitiendo chistes de Los Simpson.
Santa Fé se parecía a Celine Dion, era muy amable y hablaba mucho de su novio.
Corrientes se estaba por recibir de arquitecta y tranquilamente podría haber
desfilado como modelo de Victoria’s Secret. La Rioja era Licenciada en
Comunicación Social. Río Negro tenía el pelo cortito y una figura curvilínea.
Neuquén, un cabello largo y negro y una piel blanca de porcelana. La Pampa, no
hablaba, gesticulaba ni se movía demasiado, estaba ahí. De a ratos la situación
parecía abrumarla y a veces a mí también. Tucumán tenía rasgos marcados y
andróginos, los disfrazaba con una feminidad exacerbada. Catamarca era una
chica sencilla y simpática de sonrisa grande. Misiones era la única más linda
al natural que maquillada. San Luis tenía una pose perfecta y grandes ojos
oscuros, seguiría en los certámenes de belleza como Miss Turismo Latino 2012 y
Miss Italia Argentina 2014.
***
Mi
despertador era el solo de Tom Morello en “Like a stone”, pero no molestaba a
mis compañeras de habitación. Me levantaba, me bañaba, me ponía tooodas las
cremas y me secaba el pelo. Los cronogramas eran simples. Después de desayunar,
ensayábamos en el salón de fiestas del hotel, al finalizar almorzábamos en
Pepito’s, a la tarde hacíamos prensa en canales de televisión, cenábamos en
restaurantes un poco más elegantes y a medianoche volvíamos a dormir. Para mí,
era como una estadía paga en Buenos Aires, con la excepción de que había que
hacer lo que decían y usar tacos todo el día. Viajábamos en un colectivo
Flechabus de dos pisos. Mi lugar favorito era en cualquiera de los asientos de
abajo, me sentaba sola, escuchaba música y miraba por la ventana.
***
Los
ensayos para los desfiles de elecciones de reinas nunca me gustaron.
Básicamente consisten en caminar con tacos altísimos mientras el coreógrafo y
las demás candidatas te miran. Si no hay música, el único sonido que se escucha
es el que hacen los zapatos en el piso. Clac, clac, clac, clac….clac. Cuando
uno camina generalmente no piensa en cómo caminar, simplemente camina. Esto no
es así. Espalda derecha, cabeza como si un hilo invisible la tironeara desde la
luna, mentón en ángulo recto, estirar la pierna de atrás, despacio, mover las
caderas con gracia, los brazos deben balancearse con naturalidad. Hay que
sonreír pero no demasiado ni de verdad porque si sonreís demasiado o de verdad
se te achinan los ojos y no salís bien en las fotos. Hacer varias poses al
llegar a la punta de la pasarela, girar en el medio, medio giro, salir de
nuevo, volver, posar, y cambiarse rapidísimo para la siguiente pasada. Sin el
timing perfecto, los desfiles son un fiasco. O eso dicen. Ser modelo no es lo
mismo que ser reina de belleza, las reinas de belleza son señoritas y las
modelos pueden ser como Kate Moss.
–Chubut,
estás toda chingada, acomodate la banda ¿Y qué es esto? –el coreógrafo miró mi
piercing de la nariz y gritó que me lo sacara cuanto antes–. Buenos Aires, no
te tires todo el pelo para adelante, cuando te ven pasar piensan “qué pelazo” y
en cuanto te das vuelta parecés pelada. La Pampa, sos insulsa. Capital, seguí
así, estás divina.
***
Las
chaperonas –o hinchaperonas, como las había bautizado Miss Capital– eran
señoras paquetas que nos acompañaban a todos lados porque no podíamos ir a
ningún lugar solas. Ni al quiosco de enfrente. No nos dejaban fumar, ni tomar
alcohol, ni usar mucho el celular. Ellas tenían un par de vestidos de
emergencia. Por las dudas, para las candidatas que se chingaron o que ya
estaban chingadas. Casi todos eran corsets bordados con canutillos y polleras
de raso, como de quinceañera. Me probé uno anaranjado, uno rosa y uno negro.
Elegí el último, el que me quedaba menos corto. Dicen que el vestido en un
certamen de belleza cuenta mucho ante el jurado. No me importó, sabía que no
iba a ganar de todas formas.
***
La
elección de Miss Argentina para Miss Atlántico Internacional se realizó el
miércoles 2 de diciembre en el salón de eventos Buenos Aires. Los conductores
fueron Teté Coustarot, Fernando Mancini y Carolina Branchetti. Dijeron que ese
año querían que fuera más mediático. Por eso fuimos a Mañaneras, el programa de América. Por eso fuimos a Paraíso Terrenal, en Canal 13. También
al de Anabela Ascar en Crónica TV. Dijeron que ese año querían que fuera más
mediático. Por eso llamaron a Ricardo Fort para que cantara en el medio de la
Elección. Por eso la mamá de Ricardo Fort también cantó y después siguió
Ricardo García, el esposo de Adriana Aguirre. Por eso estuvieron Aníbal
Pachano, Dallys Ferreira, el Bambino Veira, Camila Velasco, Cau Bornes, Andrea
Estévez y el empresario Ricardo Kaufer Bernabé, quienes además participaban
como miembros del jurado. También una vez cenamos con La Tigresa Acuña,
almorzamos con Teté Coustarot y nos seguía a todos lados Vanina Gramuglia (ex Gran Hermano) con un camarógrafo. Dicen
que a la elección fueron Fabián Gianola y Guillermo Francella pero no los vi.
En
las elecciones de Miss Argentina generalmente se realizan dos pasadas en las
que todas las candidatas desfilan la misma ropa. La primera consistía en unos
vestidos cortos strapless y tacos altísimos que dolían al caminar. La segunda,
en mallas enteras negras con lunares de colores y sandalias cómodas con taco de corcho. La tercera, la pasada de
gala con la que se coronaba a la ganadora. Cuando llegamos al camarín estaba
todo listo y, además, nos repartieron accesorios de Todo Moda que luego
teníamos que devolver. El único obsequio de la noche fue la caja de Dos
Corazones que nos regaló Ricardo Fort, el
presidente del jurado.
Cuarta
princesa, Miss Mendoza. Tercera princesa, Miss Corrientes. Segunda princesa,
Miss Entre Ríos. Primera princesa, Miss Salta. Miss Argentina, Miss Capital
Federal. Había terminado. Mientras todas saludaban a sus familias, yo aproveché
para fumar un pucho con la maquilladora y hacer muecas mientras mi delegado
sacaba fotos. Era la madrugada y no comíamos desde el mediodía. Nos llevaron a
McDonalds, pedí un Big Mac y que agrandaran el combo.
***
Al
día siguiente, todas volvíamos a casa. Miss Jujuy y Miss Entre Ríos bajaron a
desayunar mientras yo terminaba de armar el bolso. Guardé los tacos y me puse
las zapatillas de lona. Sonó el teléfono.
–¿Hola?
–Hola ¿Con quién hablo?
– Con Flor.
–...
–Chubut.
–Ah.
Soy Carlos Branchetti, organizador de Miss Argentina, te llamo para decirte que
tuvimos un problema con tu pasaje de regreso ¿Podés pedirle a alguien que te
venga a buscar?
***
La
elección de Miss Chubut para Miss Argentina para Miss Atlántico Internacional
no se volvió a hacer y yo jamás entregué la corona. Igual, yo ya no soy más
Miss Chubut. Mi nombre es Florencia Nieto y sigo chingada.
Florencia Nieto
La tenías bien guardada Flor Nieto ya sospechaba que eras reina... Muy buena crónica. No podía parar de leer e imaginarte riendo en silencio de las cosas que pasan al rededor del concurso de belleza. Felicitaciones por la narración... y por la corona!!!
ResponderEliminarMe parece brutal esta crónica. Es genial el modo en que se logra contar el absurdo de cada cosa. En primer lugar, la construcción de esa Miss Chubut medio "antimiss", la "señorita" que no quiere serlo. La "modelo" antimodelo. La que sabe que tiene un capital simbólico y una belleza con qué lograr formar parte de eso para conseguir lo que quiere: el dinero para un amplificador. En segundo lugar, ciertos detalles como terminar por llamar a las participantes por el nombre de su provincia. Se genera cierta personificación de la región que, junto con las adjetivaciones de cada una de ellas, se vuelve hilarante. En tercer lugar, la congregación de personajes, algunos nefastos y otros no tanto, que circulan por el evento: inconexos entre sí y cuya presencia no queda del todo clara (como la ex "Gran hermano" que las sigue a todos lados y uno no entiende qué hace ahí y qué quiere). Varias cosas muy sgnificativas: la presentación de las participantes es muy buena; el problema final que deja en Buenos Aires a Miss Chubut hace pensar que una vez terminado el glamour, se desmantaln ciertas formalidades; que Buenos Aires le gane a Salta (teniendo en cuenta las descripciones que se hacen de ambas), nos hace odiar a Buenos Aires; y que Miss Chubut no haya entregado jamás su corona le da cierta mística mayor a la cronista. Felicitaciones!!!!
ResponderEliminarYael
Esta crónica tiene un toque de la dulzura pero inteligente Flor Nieto. Te sentí en cada párrafo que leía, como si estuvieras contándomela cara a cara. Se siente la cercanía y lo jocoso de ver a una reina - punk, tal y como sentís cuando conocés a esta bajista de la Patagonia. Muy buena y con aderezos de curiosidades, contextualización y un humor delicado como sólo esta mamasita sabe hacerlo.
ResponderEliminarMe parece que esta es una crónica entretenida, con un toque de humor que atrapa de principio a fin. Rescato el uso de diálogos y de fuentes documentales que enriquecen el texto.
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